Diez cuestiones a tener en cuenta a la hora de cuidar a alguien con incontinencia de esfuerzo
El término inglés stress incontinence se refiere a la presión añadida que se aplica sobre la vejiga o el intestino durante ciertas actividades. Ve a un lugar tranquilo, respira hondo y sigue leyendo para conocer las diez cuestiones más relevantes para cuidadores.
Si cuidas de alguien con incontinencia de esfuerzo y has consultado documentación en inglés sobre su trastorno, podrías pensar que este está relacionado con el estrés que sufre la persona, ya que en ese idioma se denomina stress incontinence. Y es verdad que la incontinencia, sea del tipo que sea, puede provocar tensión en las personas que la sufren, así como en los familiares y amigos o amigas que cuidan de ellas. Sin embargo, el término inglés stress incontinence se refiere a la presión añadida que se aplica sobre la vejiga o el intestino durante ciertas actividades (de ahí su traducción al castellano, «incontinencia de esfuerzo», puesto que stress puede significar cualquier tipo de tensión o presión, no solo la psicológica). Por ejemplo, algunas personas se dan cuenta de que sufren pérdidas de orina cuando practican ejercicio, tosen, estornudan, levantan objetos pesados o se agachan.
Entonces, ahora que ya conocemos el origen de su denominación, llega el momento de descubrir cómo deshacernos del estrés que puede provocar la incontinencia de esfuerzo. Hemos pensado que es la ocasión perfecta para dar visibilidad a aquellos que viven con personas con incontinencia o cuidan de ellas. Ve a un lugar tranquilo, respira hondo y sigue leyendo para conocer las diez cuestiones más relevantes para personas cuidadoras:
- La incontinencia de esfuerzo es más común en mujeres, pero también es posible que se desarrolle en hombres que se hayan sometido a una cirugía de próstata.
- Existen muchas causas para la incontinencia de esfuerzo, como la obesidad, la diabetes, la tos crónica, el estreñimiento y los partos.
- La incontinencia de esfuerzo no es una consecuencia del envejecimiento, aunque los cambios que acompañan a este proceso natural pueden contribuir a su desarrollo.
- Hablar abiertamente sobre la incontinencia de esfuerzo resulta embarazoso para muchos pacientes y personas cuidadoras, pero no cabe duda de que se trata del primer paso para encontrar un tratamiento adecuado. Muchos sistemas sanitarios cuentan con personal de enfermería especializado en incontinencia, el cual puede ofrecer un gran apoyo para entablar esa primera conversación. También puede proporcionar asesoramiento acerca de las opciones de tratamiento.
- Hay que tener en cuenta que el diagnóstico correcto por parte de un médico es esencial para mejorar la calidad de vida de tu familiar o persona cercana. Si todavía no lo has hecho, ¡anímales a pedir una cita cuanto antes!
- Los tratamientos de primera línea para la incontinencia de esfuerzo incluyen los ejercicios para el suelo pélvico, los dispositivos para la estimulación del suelo pélvico y los pesarios. También existen diversas aplicaciones móviles, y se están desarrollando soluciones innovadoras como, por ejemplo, sensores que pueden detectar cuándo necesita orinar una persona. ¡Y aún quedan muchos avances por llegar!
- Si los tratamientos de primera línea no surten efecto, queda la posibilidad de probar tratamientos avanzados, como los medicamentos o la cirugía.
- Existe una amplia gama de equipo y elementos asistenciales que te pueden ayudar a cuidar a un conviviente con incontinencia. El personal profesional de terapia ocupacional te guiará acerca de las opciones disponibles.
- ¡Las personas cuidadoras tienen que cuidar de sí mismas! Nadie puede cuidar de una manera eficiente si su propia salud se empieza a ver afectada. Sabemos que puede resultar complicado encontrar el momento o la energía que hacen falta para cuidar de uno mismo, pero es algo fundamental. Si puedes, intenta salir de casa y tómate un descanso siempre que te sea posible.
- Cuidar de alguien con incontinencia de esfuerzo no es algo que se deba afrontar sin ayuda. Por ejemplo, existen diferentes grupos de apoyo en línea que te permitirán compartir tus experiencias con otras personas en tu misma situación. Además, es muy probable que haya organizaciones de (in)continencia presentes en tu país o región. Aquí encontrarás una lista de las más importantes.
Cómo no, podrás encontrar mucha más información sobre la incontinencia de esfuerzo y la asistencia a personas con este trastorno en www.supportincontinence.org, ¡explora el sitio web!
Antes de terminar, nos gustaría dar las gracias a todas las personas cuidadoras del mundo por el gran trabajo que realizan cada día. Hoy es tu día, así que intenta que este Día Internacional de las Personas Cuidadoras te traiga momentos para relajarte, aliviar el estrés y hacer algo solo para ti, ¡te lo mereces!
WFIPP
Cada mes te enviaremos por correo electrónico noticias y artículos relacionados con la incontinencia.
