Cambios en el estilo de vida

Puedes hacer algunos cambios sencillos a nivel de estilo de vida para asegurar la buena salud de tu vejiga e intestinos.

¿A quién están dirigidos?

¿En qué consisten?

Puedes hacer algunos cambios sencillos a nivel alimentario y de estilo de vida para asegurar la buena salud de tu vejiga e intestinos. Echa un vistazo a las siguientes infografías para obtener más información:

Salud de la vejiga:

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Limita las bebidas con cafeína, edulcorantes artificiales, bebidas con gas, zumos y bebidas alcohólicas, ya que pueden provocar irritación en la vejiga. Además, es importante que bebas entre 6 y 8 vasos de agua al día.
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Trata de ir al servicio cada 3 o 4 horas y justo antes de irte a la cama.
Mantén un peso saludable para evitar que tu vejiga reciba una presión excesiva y no fumes, ya que la nicotina tiene un gran impacto sobre los músculos de la pared vesical.
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Practica ejercicio de forma regular (trata de hacer un poco de ejercicio ligero cada día).

Salud intestinal:

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Limita las bebidas con cafeína, alcohol y edulcorantes artificiales, ya que pueden provocar irritación en los intestinos. Además, debes beber entre 6 y 8 vasos de agua al día.
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Evita las comidas grasientas o muy especiadas y opta por alimentos ricos en fibra, como la fruta o las verduras.
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Come más a menudo y menos cantidad (las comidas ligeras son más fáciles de digerir).
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¡Muévete! El ejercicio puede contribuir al buen estado de salud de tus intestinos.

¿Dónde puedo buscar más información?

Seguro que tu médico de cabecera puede aconsejarte sobre qué pequeños cambios debes hacer en tu alimentación y tu estilo de vida. Además, es posible que te recomiende ir a un dietista o a un nutricionista para que te ayude a crear un programa adaptado a tus necesidades específicas.

Si te preocupa que tu alimentación pueda empeorar tus problemas de incontinencia, haz clic aquí y encuentra consejos e información más detallados.

Si te preocupa hacer ejercicio debido a tus problemas de incontinencia, haz clic aquí y encuentra consejos e información más detallados.

Referencias:

Buckley BS, Lapitan MCM, Prevalence of urinary incontinence in men, women, and children—current evidence: findings of the Fourth International Consultation on Incontinence, Urology, 76(2): 265–270 (2010).

Gordon B, Shorter B, Isoldi KK, Moldwin RM, Obesity with comorbid stress urinary incontinence in women: a narrative review to inform dietetics practice, Journal of the Academy of Nutrition and Dietetics, 117(6): 889– 907 (2017).